Yo siempre he sido muy fan del turrón de chocolate (ahora me lo tengo que hacer yo con esta receta) y desde hace unos pocos años del blando o de Jijona. Mira que es grasiento y calórico, pero me pirra!! Sería capaz de comerme media tableta de una sentada y sin despeinarme.
Mi intención era hacer precisamente eso, turrón blando, pero lo que he conseguido es algo diferente. No sabía muy bien cómo llamarlo, porque tiene un sabor similar al turrón duro, pero con una consistencia más blanda, sin llegar a ser como la del blando. Es más tirando a chiclosa, lo que en inglés llaman “chewy”, vamos. Pero no es pegajosa, no se te queda pegado a las muelas ni nada de eso.
Para que os convenzáis del todo, a mi txurri no le hace mucha gracia el turrón blando y en cuanto probó este le encantó. Y ya me ha pedido que lo haga para Navidades en cantidades industriales.
Cuando me puse a buscar recetas de turrón blando, vi que había dos versiones: una que usaba los ingredientes que he usado yo y otra que usa también clara de huevo. Como lo de la clara de huevo no me convencía, me decanté por la variante más sencilla. Pero todas las recetas usaban un mogollón de miel y azúcar a cascaporro. Me parecía una barbaridad, porque la miel de por sí es ya muy dulce, la almendra es pesada y además añadir un montón de azúcar pues no atraía mucho, la verdad.
Así que decidí experimentar con mi propia combinación de estos tres ingredientes y esa es la receta que os traigo. Sigue siendo hipercalórica, eso sí. Pero en estas fechas eso nos da un poco igual, ¿no? 😉
TURRÓN CASERO DE ALMENDRA
Ingredientes
- 250 g de almendras crudas sin sal
- 120 g de miel de flores
- 50 g de azúcar glas
Preparación
- las almendras que utilicemos tienen que ser sin sal, por eso lo más fácil es comprarlas crudas. Normalmente las que venden ya tostadas suelen tener sal.
- cuidado al tostarlas, que no se nos quemen. De hecho yo me pasé un poco con el punto de tostado y por eso el turrón tiene ese color tan oscuro.
- hoy en día venden moldes para hacer turrón, que suelen ser de silicona y fáciles de desmoldar. Pero nos podemos apañar perfectamente con un tupper rectangular, forrándolo con papel vegetal que luego nos ayude a desmoldarlo.
- hay que remover bien la miel con el azúcar, ya que si no lo hacemos es muy fácil que se nos queme y se pegue al cazo.
- como peso yo le puse dos bricks de leche y pasados 6 días los quité y desmoldé el turrón.